Quizá algunos cristianos tienen
conocimiento acerca de este tema y pueden, desde este principio, tener una idea
panorámica sobre los puntos importantes de este tópico. Pero existe una
cantidad considerable de cristianos que tienen poco tiempo de haber conocido la
iglesia de Cristo, y seguramente tendrán escasa o nula información. También hay
muchos jóvenes, que desde la niñez han conocido la doctrina enseñada por Cristo
y que practica la iglesia, que pueden ignorar también este tema de gran
importancia.
No deja de preocupar estas diferentes
posturas, sobre todo las últimas dos, porque algunos cristianos han abandonado
las congregaciones que se esfuerzan por hacer solamente lo que la Biblia dice y
se han ido a iglesias que, por identificarlas de alguna manera, hemos llamado
liberales. Otra preocupación es que, en un futuro, jóvenes que hoy en día no
conocen los riegos del liberalismo sean seducidos por proyectos que arrastrarán
a la iglesia a la apostasía.
Dios advirtió a los cristianos del primer
siglo sobre este gran peligro (2 Timoteo 3 - 4:1-3). Muchas iglesias y
cristianos, a pesar de contar con la presencia de los apóstoles y poder hablar
con ellos de viva voz, apostataron de la verdad:
1. Himeneo y Fileto enseñaron error sobre
la resurrección (2 Timoteo 2:17, 18).
2. Los gálatas abandonaron la verdad del
evangelio (Gálatas 6:1-9).
3. La iglesia en Pérgamo tenía algunas
doctrinas equivocadas (Apocalipsis 2:12-15).
Hay otros ejemplos de cristianos que
enseñaron error, especialmente, sobre prácticas mosaicas que querían imponer
como doctrina a los gentiles.
Apostasía significa "desertar de la
verdad". Y muchos cristianos se han desviado de la doctrina de Cristo,
entre ellos nuestros hermanos liberales.
A veces hay cristianos fieles que, en su
afán por conservar la pureza de la doctrina, no están de acuerdo en llamar
"hermanos" a los liberales. Pero lo son. Son nuestros hermanos. Más
adelante hablaremos un poco sobre el origen de esta apostasía para distinguirla
de entre las sectas.
Los liberales son miembros de la iglesia
de Cristo que abrazaron el error, como los ejemplos que vimos anteriormente.
Ellos deben abandonar sus prácticas y obedecer solamente a Dios. Es muy
diferente la situación de aquellos que se han hecho miembros de denominaciones
o sectas: nunca han sido parte de la iglesia de Cristo y por lo tanto necesitan
obedecer al plan de salvación.
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