"Pero vosotros no queráis que os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo, y todos vosotros sois hermanos" -Mateo 23:8-

miércoles, 12 de febrero de 2014

LA MENTIRA



Introducción

La mayoría de las personas saben que la mentira es condenada por Dios.

Sin embargo, muchos siguen siendo mentirosos.

Una frase, del filósofo alemán Friedrich Nietzsche, dice: “lo que me preocupa no es que me hayas mentido, sino que, de ahora en adelante, ya no podré creer en ti”.



1. Es decir lo contrario de la verdad

  1. Es la forma más común de llevar a cabo la mentira. Consiste en decir algo diferente a la verdad. Decir algo que no es cierto. Esta es la clase de mentira que practican los falsos maestros (Rom.1.25). El diablo es el padre de este tipo de mentira porque él no dice la verdad (Juan 8:44; Gen.3.1-5).
  2.  Mentimos cuando decimos algo que no es cierto: “ya estoy llegando”, “no puedo ir al trabajo porque estoy enfermo”, “ya tengo su dinero pero no puedo salir”, “necesito que me pague porque me voy a hacer unos análisis”.
  3.  Los cristianos no deben hablar mentira (Efe.4.25). 



2. Es hacer lo contrario de la verdad

  1. Un mentiroso es también aquel que hace diferente de la verdad. 
  2. Mentimos cuando decimos una cosa pero hacemos otra: “sí, nos vemos a las 5”, “yo me encargo de lavar el auto”, “yo cierro la puerta”, “yo lavo los trastes”, “hice como que no lo vi”. Un ejemplo extremo puede ser atropellar a una persona, esconder el auto y regresar al lugar para decir “qué persona tan desconsiderada, cómo pudo hacer tal cosa”.
  3. Algunos cristianos practican esta forma de mentira: 
    1. Cuando no aceptan su pecado (1Jn.1.10).
    2. Cuando no guardan la palabra (1Jn.2.4).
    3. Cuando niegan a Dios con sus hechos (Tit.1.16).



3. Es ocultar la verdad
  1.  Muchos piensan que ocultar la verdad está bien. Pero decir solo lo que es suficiente también es una mentira. Una frase dice: “Muy a menudo, casi siempre, callar es también mentir” [Joan Fuster]. Ocultar la verdad es mentir (Hc.5.1-5).
  2. A veces mentimos cuando sabemos una verdad pero no la decimos porque pensamos que no somos los indicados para ello. Sabemos que algo puede perjudicar a los otros pero no lo decimos.
  3. Los cristianos debemos ocultar la verdad (Mt.5.14, 15).



4. Es usar la verdad para engañar

  1. La verdad puede ser mentira si se utiliza con fines de engañar o causar acciones contrarias al oyente. Algunos predicaban la verdad de Cristo, pero sus intenciones son malas (Fil.1.15). Los fariseos engañaban a los gentiles con la verdad (Mt.23.15). El diablo usa la verdad para engañar (Mt.4.6).
  2. Hay cristianos que todavía mienten de esta forma: algunos padres utilizan la verdad para engañar a sus hijos para que no se vayan de casa, usan la verdad para manipular a las personas que les rodean.
  3. Los cristianos debemos ser sinceros (2 Corintios 1:12).



Conclusión.

  1. Es muy importante que hablemos con la verdad.
  2. Si usted tenía un concepto limitado de la mentira, entonces debe reflexionar si todavía es un mentiroso.
  3. Aunque vivimos en un mundo de mentiras, donde las personas mienten hasta por los codos, no debemos adaptarnos al engaño.
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