NUESTROS DEBERES HACIA ELLOS

Introducción.

1. En esta serie de estudios hemos considerado…

  a. Los términos usados para describir al anciano.

  b. El trabajo que Dios les ha ordenado.

  c. Las cualidades que deben tener para desempeñar su cargo.

2. En esta ocasión “cambiaremos los papeles”…

  a. Al examinar a los ancianos deberíamos examinarnos a nosotros mismos.

  b. A través de la consideración de nuestros deberes hacia ellos.

[Comenzaremos por escudriñar la verdad en cuanto a…]

1. Nuestra actitud hacia los ancianos.

  A. Reconocerlos…

    1. Este mandamiento se encuentra en 1 Tesalonicenses 5:12.

      a. Aunque no leemos ninguno de los términos.

      b. Ellos son los únicos que nos gobiernan (Hechos 20:28).

      c. La misma palabra (proistemi) es usada en 1 Timoteo 3:3, 4; 5:17.

    2. Apreciarlos…

      a. Del griego eidenai. “Tener respeto por alguien, cariño, poner atención a (1 Tesalonicenses 5:12)” (Thayer).

       b. “Tener respeto y reconocimiento por. Reconocer su oficio y tratarlos, en consecuencia, con reverencia y liberalidad en suplir sus necesidades (1 Timoteo 5:17)” (JFB).

  B. Estimarlos altamente en amor…

    1. Este mandamiento se encuentra en 1 Timoteo 5:13.

      a. Otra versión dice “honrarlos abundantemente”.

      b. Esta alta estima debe estar acompañada de amor.

    2. “Esta estima es una deuda por su trabajo” (B. w. Jhonson).

  C. Suplicarles como a padres…

    1. Este mandamiento se encuentra en 1 Timoteo 5:1.

      a. La palabra anciano, aquí, se usa para referirse a cualquier “hombre mayor”.

      b. Pero deberíamos aplicarla para aquellos que sirven como ancianos.

    2. Deberíamos acercarnos a los ancianos con amor y respeto, como un hijo debe hacerlo con su padre.

    3. El mandamiento de no reprender no excluye la corrección.

      a. Del griego epipleso. “Golpear sobre; castigar con palabras, regañar, reprender, reprochar” (Thayer).

      b. “La versión Árabe dice: “no golpees a un anciano”; significa que, no con los puños, pero con la lengua, dando duras palabras que también son duros golpes” (Gill).

      c. Note lo que dice la Escritura sobre los ancianos que pecan (1 Timoteo 5:20).

  D. Tenerlos por dignos de doble honor…

    1. Esta instrucción se encuentra en 1 Timoteo 5:17, 18.

    2. En relación a los ancianos que:

      a. “Gobiernan bien”. Manejan eficientemente al rebaño.

      b. “Los que trabajan en predicar y enseñar”. A través del estudio y sus lecciones.

    3. Considerados dignos de doble honor.

      a. “De doble respeto; que es un alto grado de respeto; de un grado de respeto como lo es su edad y oficio” (Banners).

      b. “De la cita que se encuentra en 1 Timoteo 5:18, en relación con éste sujeto, debería notarse que, probablemente, el apóstol hacía alguna referencia a su soporte o de lo necesario para su mantenimiento” (ibíd.).

  E. No debemos recibir acusaciones sin pruebas…

    1. Esta advertencia es dada en 1 Timoteo 5:19.

    2. “No aceptar acusaciones de pecadores o malhechores contra un anciano, antes de presentar dos o tres testigos” (Lipscomb).

    3. El testimonio de dos o más es similar a lo que se requería en la ley de Moisés (Deuteronomio 19:15).

[Con tales actitudes, como respeto, amor y bondad hacia los ancianos, debemos obedecer a los ancianos. Pero también es importante tener una buena conducta…]

2. Nuestra conducta hacia los ancianos.

  A. Debemos estar en paz…

    1. El mandamiento se encuentra en 1 Tesalonicenses 5:13.

    2. Esto debe facilitar el trabajo del anciano.

    3. Si le complicamos el trabajo, con envidias, pleitos y divisiones, seremos traídos a cuenta (Hebreos 13:17).

  B. Debemos obedecerles…

    1. Este mandamiento se encuentra en Hebreos 13:17.

      a. Quizá no aparezca alguno de los términos del anciano.

      b. Pero ellos son los únicos que nos gobiernan (1 Timoteo 3:4, 5; 5:17).

    2. Obedecer.

      a. Del griego peitho. “Escuchar a, obedecer” (Thayer).

      b. “Poner constante atención a la palabra que nos predican, escucharles; recibir con fe y amor, como enseñan las Escrituras. Una actitud contraria es dañina a las almas y altamente irritante para Dios. Debemos presentarnos y sujetarnos a ellos en el Señor y recompensar sus advertencias, consejos y sugerencias” (Gill).

  C. Estar sumisos…

    1. Este mandamiento se encuentra en Hebreos 13:17.

      a. Quizá no aparezca alguno de los términos del anciano.

      b. Pero ellos son los únicos que nos gobiernan (1 Timoteo 3:4, 5; 5:17).

    2. La sumisión.

      a. Del griego hupeiko. “No resistirse, dar el paso; metafóricamente, rendirse a la autoridad y gobierno, someterse” (Thayer).

      b. “No solamente obedecer donde no hay que esforzarse y cuando uno está convencido de que están en lo correcto (el significado de obedecer); pero someterse uno mismo, rendirse, cuando el juicio y voluntad natural se inclina a oponerse a la autoridad” (JFB).

  D. Debemos imitarlos…

    1. Este mandamiento se encuentra en Hebreos 13:7.

      a. Otra vez se presume que se refiere a los ancianos.

      b. Ellos son los pastores y los que hablan la palabra de Dios (1 Timoteo 3:2, 4, 5; Tito 1:9).

    2. Imitar su fe.

      a. Tratar de tener la fe que ellos tienen.

      b. Tratar de hacer lo que ellos hacen.

    3. Este pasaje puede hacer referencia a ancianos que ya han muerto.

      a. “Acordaos… considerad cuál haya sido el resultado de su conducta”.

      b. Ellos vivieron para conseguir lo bueno; fueron fieles a Dios y a su causa; sufrieron persecución y, por el testimonio de Jesús, murieron muertes violentas. Dios nunca los dejó, Él nunca los abandonó, así que estaban felices en sus aflicciones y gloriosos en su muerte. Considerad esto; haced como ellos hicieron; guarden la fe y Dios los guardará” (Clarke).

    4. Ciertamente es bueno imitar a aquellos que son maduros en fe (Filipenses 3:17).

  E. Debemos llamarlos cuando hay necesidad…

    1. La instrucción se encuentra en Santiago 5:14.

      a. Dada a aquel que está enfermo.

      b. Llamar a los ancianos para que oren por él.

    2. Note de quién es la responsabilidad de llamar a los ancianos.

      a. Aquellos que están enfermos deben llamar (no esperar a que los llamen).

      b. Mientras los ancianos están velando las almas, no siempre pueden saber todas las necesidades.

    3. Si nuestras necesidades son físicas o espirituales, no espere a los ancianos. ¡Llámelos!

Conclusión.

1. El trabajo de un anciano es grandioso al igual que sus responsabilidades.

“porque ellos velan por nuestras almas, como quienes han de dar cuenta” (Hebreos 13:17).

2. Nosotros también tenemos una seria responsabilidad con ellos.

“Obedecedlos a fin de que ellos cumplan su tarea con alegría y sin quejarse, pues el quejarse no les trae ningún provecho” (Hebreos 13:17 BAD).

¡Pueden, nuestras actitudes y conductas, alegrar el trabajo del anciano!

En nuestro siguiente estudio vamos a considerar algunas cosas acerca de la elección y asignación de hombres calificados para servir como ancianos…