INTRODUCCIÓN
La visión infantil de los sucesos de la vida cotidiana, de las palabras,
predicaciones e historias bíblicas, es bastante diferente a la visión adulta.
Las historias infantiles como los cuentos de hadas, le enseñan a los niños
importantes lecciones de vida, valores, moral y además les ayudan a aliviar
angustias, ansiedades, temores, infundir seguridad aliento y ánimo; tal como lo
explica Bruno Bettelheim, en “psicoanálisis de los cuentos de hadas”.
Pero además, una serie de inagotables historias verdaderas de
incalculable valor la encontramos en la Biblia. Antes de analizar una historia
bíblica y sus enseñanzas para los niños, quiero mencionar algunas cosas
importantes.
Dios
mandó narrar la historia a los niños (DEUTERONOMIO 6:6, 7).
Hay una diferencia entre, leer personalmente, leer al niño y contarle.
Para contar una historia, hay que vivirla.
Así que ahora vamos a meditar en una historia del pueblo judío y meditar
en lo que un niño aprendería de ella. La historia de David y Goliat. Haré un
pequeño resumen de 1 SAMUEL 16, 17.
Hace muchos años, Dios le dijo al profeta Samuel que fuera a la casa de Isaí para ungir a uno de
sus hijos. Isaí tenía 8 hijos, David, era el más pequeño, y sus hermanos eran
fuertes y hábiles. Todos pasaron frente a Samuel, pero ninguno de ellos era el
elegido por Dios. Entonces Samuel mandó que Isaí trajera a su hijo David, el
más pequeño, era rubio y bonito; y era pastor de ovejas. Entonces Samuel lo
ungió porque Dios eligió a David para que David fuera rey.
Después de un tiempo hubo guerra entre el pueblo judío y los filisteos.
Había uno que era muy alto, medía casi 3 metros de alto y era muy fuerte, su
nombre era Goliat. Nadie podía derrotarlo. Los hermanos de David eran soldados,
pero no podían derrotar a Goliat. Cuando David escuchó que todo el pueblo tenía
miedo de Goliat, fue hasta el campo de guerra para pelear contra Goliat.
Sus hermanos lo vistieron con la ropa de guerra, pero era muy grande y
pesada y él no podía caminar; le dieron armas pero tampoco las podía usar. Así
que se puso su propia ropa y tomó su honda, agarró cinco piedras de río y fue a
pelear contra Goliat.
Goliat le dijo a David: -acaso
soy un perro para que vengas a pelear con piedras contra mí.
-Soy pastor de ovejas y he
peleado con osos y leones para cuidar las ovejas- contestó David: -y vengo a
pelear en el nombre de Jehová de los ejércitos.
David tomó una piedra y la lanzó, golpeó en la frente a Goliat y así lo
derrotó. Después tomó su espada y se quedó con ella.
LES ENSEÑA QUE…
…SI TIENEN HERMANOS MAYORES,
PUEDEN SER MEJORES QUE ELLOS (16:1-11)
…LA FUERZA FÍSICA NO ES LO MÁS
IMPORTANTE (16:12)
…A VECES LOS MAYORES TAMBIÉN
TIENEN MIEDO (17:4-11, 24)
...MUCHAS VECES SU LUGAR NO ES
COMO EL DE LOS OTROS (17:38-29)
…JUGANDO TAMBIÉN SE APRENDE
(17:34-36)
…TAMBIÉN PUEDE VENCER A LOS
GIGANTES (17:33, 49)
…UN DÍA OCUPARÁ EL LUGAR DE
LOS GIGANTES (17:51)
Una de las cosas más importantes que debemos recordar, es la importancia
de enseñar historias bíblicas desde la infancia (2 TIMOTEO 3:15). Además
debemos recordar que las mejores historias se cuentan con amor, pero también
hay que creerlas.
Anne Rice en su trilogía sobre la vida de Jesús, describe cómo los
judíos se reunían para contar las historias bíblicas, era tan fascinante que
llegaban a aprenderse de memoria las historias, oraciones que contenían, además
de ser un espacio familiar, agradable e instructivo.
Ya hemos analizado una historia;
antes de pasar a otra historia debemos preguntar siempre a los niños, si
quieren oír una historia diferente. Otra de las historias predilectas de la
escritura es “Jonás y la ballena”.
Ésta historia contiene muchas otras enseñanzas útiles a los niños.; hagamos un
resumen de la historia.
Jonás era un profeta que vivió muchos años atrás. Dios le pidió que
fuera a una ciudad llamada Nínive a predicar su palabra. Pero él prefirió irse
a otro lugar, se subió y se fue en un barco. Mientras iba en el mar, Jonás
dormía tranquilamente, pero no sabía que el barco se estaba hundiendo. El
capitán del barco despertó a Jonás y le preguntó quién era y por qué estaba
ahí.
- Soy un profeta de Dios, él me envió a Nínive pero preferí venir a
este barco- Dijo Jonás – para que no mueran, tienen que arrojarme al mar.
Y así lo hicieron, pero Jonás no sabía que Dios mandó una ballena para
que se lo tragara. Estuvo tres días y tres noches en el vientre de la ballena,
hasta que oró a Dios.
Entonces la ballena vomitó a Jonás. Después Dios volvió a pedirle que
fuera a Nínive, ahora fue y advirtió a las personas que Dios los iba a castigar
si no se arrepentían.
Cuando salió de la ciudad, Jonás se fue al desierto para ver si Dios destruía
la ciudad, pero no lo hizo porque aquellos hombres se arrepintieron de sus
pecados; y Jonás se enojó mucho.
En el desierto, Jonás se hizo una casita de palos, pero Dios hizo que
crecieran plantas para protegerlo del sol; pero durante la noche, un gusano se
comió a las plantas y el calor hizo que Jonás se enojara otra vez.
En realidad, la historia de Jonás
no tiene un final; no sabemos qué pasó con él, a dónde fue enviado, si aprendió
la lección o no.
LES ENSEÑA QUE…
…NO SIEMPRE ES CONVENIENTE TODO
HACER LO QUE UNO QUIERE (1:1-6)
…NO PUEDE ESTAR TODO EL TIEMPO EN
EL VIENTRE (1:17)
…DECIR LA VERDAD TRAE BUENOS
RESULTADOS (2:1, 10)
…OBEDECER NO SIEMPRE PROVOCA
ALEGRÍA (3:1-3; 4:1)
…EL ENOJO NO VA A DESTRUÍR A LAS
PERSONAS (4:1, 11)
…EL ENOJO NO CAMBIA LAS
DECISIONES DE LOS ADULTOS
Muchas de las importantes
lecciones que los niños viven a través de las historias bíblicas, deben ser
confirmadas con lo que se vive en casa.
Quizá puedan sentirse confundidos
en algún momento, sin saber cuál es su lugar, pero además la historia de Jonás
simboliza perfectamente la dependencia del niño hacia los padres. No hay que
olvidar que si un padre y especialmente una madre, son inmaduros, no serán un
apoyo adecuado al desarrollo de sus hijos.
Las lecciones no se mandan ni se
explican, se viven en el niño.
Ahora que hemos comprendido la
dinámica de cómo los niños aprenden lecciones a través de las historias
bíblicas, vamos a profundizar un poco más en el análisis de las historias.
Los niños aprenden innumerables lecciones en las historias;
probablemente ya nos hemos dado cuenta de ello; pero también es cierto que hay
lecciones que el niño aprende que son difíciles de identificar para el adulto
(MATEO 11:25)
Así que las historias bíblicas enseñan muchas más cosas al niño de lo
que nosotros podríamos pensar; es decir, además de las historia del pueblo de
Dios, la fe, el conocimiento de Dios, etc. Hay enseñanzas prácticas y muy
intensas que se encuentran en las historias.
Analicemos más a profundidad otra historia, “el nacimiento de Moisés”. Haremos el resumen acostumbrado (ÉXODO 1,
2:1-10).
Hace mucho tiempo, cuando el
pueblo judío era esclavo de los egipcios. El rey de Egipto, el faraón, mandó
que mataran a los niños judíos porque no quería que hubiera muchos hombres y
algún día se rebelaran a su autoridad.
En ese tiempo, nació un niño
hermoso y su mamá lo escondió por tres meses, pero luego no pudo esconderlo más
y le hizo una canasta, le puso todo lo que necesitaba y dejó al niño en un río;
la hermana del niño lo veía desde la orilla.
La princesa de Egipto que
pasaba por el río, encontró la canasta y vio al niño; ella sabía que era un
niño judío. Pero la hermana del niño se acercó a la princesa y le dijo que si
quería llamar a una nodriza para cuidar al niño. La hija del faraón mandó a la
niña a buscar una nodriza.
Así que llamó a la mamá del
niño quien lo crió hasta que era lo suficientemente grande para que se fuera a
vivir con la hija del faraón. Ella lo adoptó y le puso por nombre, Moisés, que
significa sacado de las aguas.
LES ENSEÑA QUE…
…LAS PERSONAS CAMBIAN. A
través de la historia, el niño es criado por dos personas muy diferentes (2:1,
2, 5, 6, 10). Pero el niño observa en estas personas, una sola figura, la de la
madre. Al mismo tiempo observa cómo éstas dos personas tienen notables
diferencias, una es esclava, pobre, bondadosa, etc. La otra es una princesa,
prudente, tiene orden de hacer matar a los niños.
A pesar de las evidentes diferencias, también se percibe las
similitudes, el deseo de proteger al niño, el compromiso con la vida, la
maternidad. Los cuentos de hadas presentan ésta dualidad de diferentes formas, la
bruja, la madrastra, la anciana malvada, el lobo que ocupa el lugar de la
abuela. Pero al mismo tiempo les prepara para comprender que el ser humano
cambia de un momento a otro.
Lo que además le permite fantasear sobre su origen familiar.
…EL VÍNCULO AFECTIVO CON SU
MADRE, ES IRREMPLAZABLE. Es sumamente interesante que a pesar de la
sentencia de muerte, de haber sido encontrado por la hija del faraón, Moisés
tiene la oportunidad de estar con su madre biológica (2:8, 9). Seguramente el
niño puede comprender la importancia de su relación con la madre, y no como un
tema expuesto o una fórmula recitada, sino por la experiencia de vida.
Pero al parecer, ésta lección va en doble sentido; son los adultos
quienes deben comprender la importancia del papel que asumen en la maternidad.
¿Es una madre madura, capaz? (2 TIMOTEO 1:5). Pero además, prepara al niño a
sufrir una pérdida de éstas dimensiones, ser huérfano. Y lo prepara en el
sentido de que puede perder a la madre, pero puede encontrar alguien en quien
confiar.
…EL PROCESO DE SU CRECIMIENTO.
Hay muchos factores que debemos considerar; incluso hablando únicamente del
primer año de vida. Es algo que el niño debe comprender, y que no hay
explicaciones dialogadas para abordar el asunto.
Primero note que la muerte
siempre está presente (EXODO 1:15, 16, 22). Es decir, existe la posibilidad de
morir. El niño crece con su madre hasta los tres meses (EXODO 2:3), nuevamente
parece que la lección debería ser para los padres; el niño debe ser llevado a
su propia habitación a los tres meses aproximadamente, es parte de su
crecimiento; después de éstos tres meses, el niño comienza una parte importante
de su desarrollo.
Luego, es encontrado por la hija de Faraón y entregado a su madre en
término de “nodriza”. Posteriormente es devuelto a la princesa para que lo críe
y le pone un nuevo nombre. Para éste nuevo cambio en su crecimiento, no sabemos
la edad de Moisés, pero podemos suponer dos edades, entre los 6 y 8 meses o los
12 y 18 meses. Esto coincide con lo que dice la escritura sobre Moisés, fue
entregado a la princesa cuando creció, es decir, no requería los servicios de
una nodriza (2:10), es decir, este período de separación involucra una serie de
acontecimientos en el bebé. Quien más tarde puede comprender que han sido
procesos de su crecimiento. Éstas son las primeras lecciones de límites que los
niños aprenden (SALMOS 131:2), o no. El sentimiento asociado al destete, es la
frustración, el aceptar límites; o ser humillado o en exceso gratificado.
En éste sentido, la historia de Moisés es
sumamente valiosa, le hace recordar al niño, épocas pasadas en que su mundo
giraba en torno a la madre, o al revés, según el niño.
Primero que nada, son lecciones para adultos, cuando un adulto ha pasado
por un desarrollo saludable, seguramente puede proporcionar uno saludable.
La biblia nos prepara para adorar a Dios de una manera correcta, de
nosotros depende vivir una vida agradable.
Ya hemos mencionado la importancia de los padres en la crianza de los
niños, con la historia del nacimiento de Moisés, esto queda reafirmado. También
hemos mencionado la importancia de contar las historias bíblicas a los niños,
es un espacio personal, familiar, educativo y vivencial.
Lo que también indica que las historias bíblicas le ayudan al niño de
muy diversas formas. Pero hay que dedicarle tiempo, ser responsable y estar
comprometido con la responsabilidad familiar y espiritual.
En otras lecciones podremos notar otros aspectos importantes sobre la
vivencia del niño a través de las historias bíblicas, y las múltiples lecciones
que puede aprender.
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