Aún hay otras cosas que nos dividen, son
cuestiones de doctrina y no de opinión como algunos piensan.
El evangelismo social.
Argumento: producto de su liberalidad, en cuanto a la organización de la iglesia,
estos hermanos usan sus instituciones como medios de atraer miembros a la
iglesia, hacen descuentos, promueven ayudas, etcétera. Intentan defender su
práctica con la excusa de la libertad para usar medios o tácticas de
evangelización.
Refutación: Jesús, sus apóstoles y los primeros cristianos, nunca predicaron
utilizando estos medios. Aun cuando Jesús alimentó a sus seguidores siempre fue
después de haberles predicado. Y en una ocasión, que Él notó el interés
terrenal de su audiencia, los reprendió (Juan 6:26, 27).
1 Corintios 7:24. El perdón del adulterio en
el bautismo.
Argumento: algunos de nuestros hermanos liberales interpretan que este pasaje
enseña que las personas que viven en adulterio pueden continuar en su condición,
después de su bautismo, porque han recibido el perdón de sus pecados.
Refutación: tal afirmación es errónea porque ignoran varios pasajes de la
escritura. La única causa permisible para contraer segundas nupcias es la
fornicación del cónyuge (Mateo 9:19), cualquiera que se separa por cualquier
otro motivo y se vuelve a casar, vive en adulterio, ese pecado puede ser
perdonado en el bautismo si lo abandona, compare otros pecados como el robo,
borrachera, homosexualidad, etcétera. Los corintios sabían que el bautismo
perdona los pecados si el pecador los deja de hacer (1 Corintios 6:9-11). El
pasaje que mal interpretan los hermanos liberales no está hablando del
adulterio sino de la condición social de aquellos cristianos: esclavos o libres
(v. 22, 23).
Mateo 13:24-30. No se puede reprender al
pecador.
Argumento: en el liberalismo se toleran muchos pecados, se aceptan condiciones
reprobables porque, basándose en esta parábola, creen que la iglesia no puede
quitar la cizaña que hay entre ella.
Refutación: la parábola, del trigo y la cizaña, no está hablando de la disciplina
en la iglesia, véase la explicación de Jesucristo (v. 36-42). El campo en el
que los cristianos y pecadores habitan juntos es el mundo y eso no se puede
cambiar (1 Corintios 5:10). Pero la iglesia debe señalar a los pecadores que
están en medio de ella y reprenderlos (1 Corintios 5:11; 2 Tesalonicenses
3:14).
Las cosas que nos dividen son serias y
tendrán graves consecuencias. Dios advierte que las iglesias en esta condición
deben arrepentirse y dejar sus prácticas, de otro modo Él peleará contra los
apóstatas (Apocalipsis 2:15, 16). El problema de que muchos cristianos, tanto
conservadores como liberales, ignoren las cuestiones que nos dividen es que
estemos comulgando con apóstatas (2 Juan 1:9-11).
El principal error de los liberales fue
haber perdido el respeto por la autoridad bíblica, su lema original: "hablar
donde las Escrituras hablan y callar donde ellas callan", pasó a un
segundo término. Una vez que se permitieron ir más allá de la escritura se
abrió una puerta a la apostasía, cada día se han alejado más y más. En la
actualidad existen iglesias de Cristo (liberales por supuesto) que usan
instrumentos musicales, permiten que las mujeres usen el púlpito, hacen eventos
sociales como iglesia (se visten de revolucionarios por ejemplo), realizan
juegos, tienen canchas y salones de fiestas, etcétera. Es liberalismo en su
pura expresión. El legado del liberalismo está rompiendo con las fronteras de
la doctrina de Cristo. Una nueva generación liberal se ha levantado y cada día
se aleja más del diseño divino de la iglesia.
Es necesario que la iglesia de Cristo
procure conservar la fidelidad de la doctrina predicada por Cristo y sus
apóstoles (2 Timoteo 1:13; Hechos 2:42). Las nuevas generaciones deben tener
conocimiento de los errores del liberalismo para evitar la apostasía, porque si
no lo hacen pueden ser destruidos (Oseas 4:6).
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