LA IGLESIA EN ESMIRNA

(Apc.2.8-11) - 29 mar. 07 -

Introducción.

  A. Esmirna es una antigua ciudad en la costa occidental del Asia Menor, en la desembocadura de un golfo, que alcanza 48 kms. Hacia el interior y que le dio un buen puerto. Fue fundada por Teseo (1312 a. de J.C.), nombrada por su esposa y poblada por los asiáticos conocidos como lelagos y parece haber sido tomada de ellos por los griegos eolios cerca de 1100 a. de J.C. Fue hecha miembro de la confederación eólica en 688 a. de J.C. y fue tomada por los lidios bajo la jefatura del rey de Sardis en 627 a. de J.C. Lisímaco (301-281) la reedificó en un sitio nuevo y la cercó, después de lo cual vino a ser un gran centro comercial. Fue una de las ciudades más brillantes de toda Asia Menor durante los tiempos romanos. Las calles eran anchas y pavimentadas. Tenía escuelas de ciencia y medicina, muchos edificios hermosos, y un teatro con capacidad para 20.000 personas.

  B. Una iglesia que estaba en una ciudad en donde ser cristiano representaba un grande riesgo.

I.- Su riqueza.

  A. Aunque históricamente había sido una cuidad con una buena economía, la iglesia en ese lugar estaba pasando por pobreza económica, quizá se debía a que sus propiedades habían sido confiscadas por Domiciano.

  B. La riqueza de ésta iglesia consistía en algo espiritual, en las cosas de Dios (Hb.10.34), ellos habían atesorado para con Dios (Mt.6.19, 20).

  C. Ésta iglesia había heredado de Dios, sus bendiciones, su reino (Stg.2.5), eran ricos, en lo que a Dios le agrada (1Tim.6.18).

II.- Su buena reputación para con Dios.

  A. Los judíos perseguían a la iglesia (Hc.13.50), aunque no eran judíos en dos sentidos: (1) no seguían la enseñanza de Moisés y no eran dignos de llamarse judíos; (2) no eran judíos espirituales (cristianos) (Rom.2.28, 29).

  B. Estas personas, falsas, se habían convertido en una sinagoga de Satanás, malvados como las personas en Pérgamo. Cristo en otro tiempo los llamó hijos del diablo (Jn.8.44). Los falsos judíos hacían las obras de Satanás. Cristo conocía la calumnia de aquellos hombres (BAD, BL95), y sabía que ellos mentían, pero Cristo conoce a los suyos (Jn.10.14), él sabía que las cosas que hablaban en contra de la iglesia eran falsas.

  C. Hay personas que prefieren ser alabados por los hombres (Jn.12.43), pero ésta iglesia era alabada por el Señor, eso era una doble bendición.

III.- Su tribulación.

  A. Ésta iglesia recibió aliento y ánimo del Señor, no se le reclamó infidelidad, falsas doctrinas, pecado, etc., era una buena iglesia. El diablo no soporta que las iglesias del Señor estén santas, sino que procura destruirlas, siempre lo ha intentado (Lc.22.31 (Pedro en particular); Jn.10.10; Hc.6.1).

  B. Esta no fue la excepción, Jesús quiere presentarse una iglesia santa y gloriosa, por ello advirtió a su iglesia de la tribulación que padecería, y de la necesidad de perseverar hasta el fin. La ciudad sufrió grandemente por terremotos en 178-80 d. de J.C. Durante la Edad Media fue el escenario de muchas luchas, la más feroz de las cuales fue dirigida por Timur en contra de los cristianos. Hizo una torre de 1.000 cabezas de sus víctimas. Esmirna fue la última de las ciudades cristianas en mantenerse firme contra los mahometanos, pero cayó bajo los turcos en 1424.

  C. La iglesia en Esmirna sabía que si se mantenía firme aunque tuviera que morir físicamente, no sufriría daño en la segunda muerte.

Conclusión.

  A. La iglesia en Esmirna era una iglesia como la mirra (Grieg., smurna), cuyo sabor es amargo, y tiene propiedades astringentes, usándose como antiséptico y estimulante. Se usaba como perfume (Sal 45.8). Era uno de los ingredientes del aceite de la santa unción para los sacerdotes (Éx 30.23; «mirra excelente»). Se usaba también para la purificación de las mujeres (Est 2.12); para embalsamar (Jn 19.39); como calmante (Hiel, Cristo no quiso calmar su dolor, ahora se complace con ésta iglesia). Fue uno de los presentes de los magos (Mt 2.11).

  B. Una iglesia que hasta el día de hoy, es y debe ser un consuelo para nosotros.

  C. Podemos aprender de ella su valor, su resistencia, su fidelidad, santidad y riqueza para con Dios. Es un ejemplo a seguir para cada iglesia local.