"Pero vosotros no queráis que os llamen Rabí; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo, y todos vosotros sois hermanos" -Mateo 23:8-

domingo, 1 de enero de 2017

LA RESPUESTA DEL PADRE NUESTRO


(Cantares 2:14-15)



Paloma mía, que estás en los agujeros de la peña, en lo escondido de escarpados parajes, Muéstrame tu rostro,
hazme oír tu voz;
Porque dulce es la voz tuya,
y hermoso tu aspecto.
Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas;
Porque nuestras viñas están en cierne.

Reina Valera 1960
Paloma mía, que anidas en las grietas de las rocas y en los riscos de las montañas, déjame ver tu rostro, déjame oír tu voz; porque tu voz es dulce y hermoso es tu rostro».
Atrapen a los zorros, a esos zorros pequeños que arrasan las viñas, porque nuestra viña está ahora en flor.
La Palabra de Dios para Todos



Introducción
A.    El contexto del pasaje…
a.       Forma parte de las palabras que Salomón dijo a la Sulamita.
b.      Pero ella las canta.
B.     Las figuras en este pasaje…
a.       Salomón = Dios.
b.      La Sulamita = la iglesia.
c.       El poema = la respuesta de Dios a la oración del “Padre nuestro”.
C.     Palabras clave…
a.       Paloma mía puede ser una alusión al inicio de la oración modelo.
b.      Que estás es una expresión característica de la oración modelo.
c.       Este pasaje puede representar la forma en que Dios responde a la oración modelo. Es decir, es un modelo de respuesta.

1. Padre nuestro
A.    Paloma mía.
a.       Salomón la compara con una paloma.
b.      Por su belleza y su delicadeza.
B.     La aplicación...
a.       En otros textos el pueblo de Dios fue comparado con una paloma, es la paloma del Dios (Salmo 56:1; 74:19; Oseas 7:11).
b.      Cristo comparó a los discípulos con palomas (Mateo 10:16).
c.       Cuando oramos “Padre nuestro”, él responde “paloma mía”.

2. Que estás en los cielos
A.    que estás en los agujeros de la peña, en lo escondido de escarpados parajes.
a.       Salomón descubre la timidez de la Sulamita.
b.      Él la invita a salir de su refugio, de su casa, de su habitación.
B.     La aplicación...
a.       La habitación de los hombres es terrenal (2 Corintios 5:1).
b.      El cristiano busca refugio en la roca (1 Corintios 10:4; Filipenses 4:13). La roca es Cristo.
c.       Cuando reconocemos el lugar donde habita Dios, entonces comprendemos lo insignificante que es lo terrenal. Solo así podemos orar por las cosas que en verdad necesitamos.

3. Santificado sea tu nombre
A.    Muéstrame tu rostro.
a.       La palabra hebrea para rostro también se puede traducir como apariencia, figura, forma, lo que se ve, lo que se presenta ante los ojos.
b.      Salomón la llama, quiere verla, quiere contemplarla.
B.     La aplicación...
a.       ¿Qué es el hombre? (Deuteronomio 5:26; Job 7:17; Salmo 8:4; 144:3; Hebreos 2:6).
b.      Reconocer la santidad de Dios conlleva reconocer nuestra naturaleza pecaminosa (1 Juan 1:8-10).
c.       Sobre todo, en la oración debemos reconocer nuestras ofensas a Dios.

4. Hágase tu voluntad
A.    hazme oír tu voz.
a.       Salomón quiere escuchar todo lo que ella tiene que decir.
b.      Quiere saber cuáles son sus peticiones.
B.     La aplicación...
a.       Dios oye al justo (Salmo 139:4 Proverbios 15:29; Juan 9:31; Santiago 5:16).
b.      Nosotros hacemos oír nuestras peticiones a Dios por medio de la oración.
c.       Pero él concederá lo que sea su voluntad (Santiago 4:3; Lucas 22:42).

5. El pan nuestro de cada día
A.    Porque dulce es la voz tuya.
a.       Salomón se deleita al escuchar a la Sulamita.
b.      Su voz es delicia.
B.     La aplicación...
a.       Dios también se deleita en las oraciones de sus hijos, él quiere escuchar nuestras oraciones (Proverbios 15:8; Apocalipsis 5:8).
b.      Los hombres nos alimentamos con pan cada día.
c.       Pero Dios se deleita con nuestras oraciones (1 Tesalonicenses 5:17).

6. Y perdónanos
A.    Hermoso tu aspecto.
a.       Todos desprecian a la Sulamita por su aspecto (Cantares 1:6).
b.      Pero Salomón la ve hermosa.
B.     La aplicación...
a.       Dios nos amó a pesar de nuestras imperfecciones (Romanos 5:8).
b.      Cristo se entregó para embellecer a la iglesia (Efesios 5:25-26).
c.       En la oración reconocemos nuestra condición, pedimos perdón y Dios nos hace limpios.

7. Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal
A.    Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas.
a.       Las zorras abundaban en Judea. Estos animales disfrutan comer las uvas.
b.      Salomón no quiere que la Sulamita repita su mala experiencia (Cantares 1:6).
B.     La aplicación...
a.       El adúltero rey Herodes fue comparado con una zorra (Lucas 13:32).
b.      Los falsos profetas fueron comparados con zorras (Ezequiel 13:4).
c.       Estos pecados pueden echar a perder la viña del Señor (1 Corintios 5:6; 2 Timoteo 2:17). Por eso la iglesia pide librarse de la tentación.

Conclusión
A.    Estos pasajes nos muestra el “modelo de respuesta” de Dios a nuestras oraciones…
a.       Él nos ve como palomas: sencillos y preciosos cuando le alabamos.
b.      Él quiere que no solo pidamos cosas terrenales, sino espirituales.
c.       Él quiere que reconozcamos nuestra naturaleza.
d.      Él quiere que expresemos nuestras peticiones.
e.       Él quiere que oremos constantemente.
f.       Él quiere que pidamos con arrepentimiento sincero.
g.      Él nos dará protección si le pedimos.
B.     Si oramos correctamente, Dios responderá…
a.       Con prontitud, como Salomón habló pronto.
b.      Con generosidad, como Salomón quiere suplir las necesidades de la Sulamita.
c.       Con amor, como Salomón habla con ternura a la Sulamita.

C.     En vista de esta respuesta favorable, ¡oremos a Dios siempre!
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