(Josué 2 y 6)
Introducción
- Quizá al leer Rahab inmediatamente pensamos “la ramera”.
- Su historia se narra en Josué 2.
- Ella recibió a los espías judíos (v. 1).
- Los escondió (v. 4).
- Les creyó (v. 9).
- Los ayudó a escapar (v. 15).
- Gracias a esto salvó su vida y la de su familia (Josué 6:17, 22-25).
- Pero ella obtuvo bendiciones más grandes...
1. Fue contada con el pueblo de Dios
- Ella fue gentil o extranjera (Josué 2:1).
- Pero se incluye entre las familias judías (Mateo 1:5).
- Nosotros éramos gentiles, pero ahora podemos pertenecer al pueblo de Dios por medio del evangelio (1 Pedro 2:9).
2. Fue perdonada de sus pecados
- Ella era ramera (Josué 2:1).
- Pero fue justificada porque tuvo una fe con obras (Santiago 2:25).
- Nosotros éramos pecadores (quizá algunos todavía lo son), pero hoy podemos recibir el perdón de nuestros pecados por medio del bautismo (Hechos 22:26).
3. Fue mencionada entre las personas de fe
- Usted tal vez la recuerda porque fue una ramera (Josué 2:1).
- Pero se incluye en la lista de personas de fe (Hebreos 11:31).
- Nosotros estábamos lejos de Dios, pero hoy podemos inscribirnos entre los hombres de Dios (Éxodo 32:31-33; Lucas 10:20; Filipenses 4:3; Apocalipsis 3:5).
Conclusión
- ¿Se imagina la felicidad de esta mujer?
- ¡Usted también puede gozar de estas bendiciones!
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